Mi 2020 y mis propósitos para 2021
Hará una semana me preguntaba un amigo si alguna vez me había planteado escribir de manera pública, sobre cualquiera de las miles de cosas que me interesan. Pensé: “qué vergüenza”, pero empecé a tener un rintintín dentro de mí. Eso, unido al directo de Twitch de Óscar Martín en el que participé para repasar el 2020 y hablar del 21, han hecho que hoy, 31 de diciembre de 2020, esté aquí escribiendo y que tú me estés leyendo.
He hecho el ejercicio, por primera vez en, de sentarme a reflexionar sobre mi año. Algo casi tan terapéutico como comerme un helado en un día duro.
Esta es mi reflexión acerca del 2020 y mis propósitos para el año 2021. Pongo mis esperanzas en que, al hacerlos públicos, me motive un poquirritín más a cumplirlos 😉.
2020: WTF
2020. Una mierda de año. Por supuesto por todo lo que ya sabemos todos: vidas perdidas, enfermos con secuelas, sanitarios agotados, una crisis económica que va a hacer polvo a tantas, tantísimas familias… No me voy a parar mucho en hablar de la enorme mierda que es todo esto.
En el plano personal, solo sentir la soledad y la pena de mis abuelos, ver cómo lo han pasado mis familiares sanitarias —unas cuantas en la familia Miquel — y pensar en la situación económica de unos cuantos conocidos se me parte el alma. No hay dios que devuelva todos los abrazos que nos hemos perdido.
No sé si alguien compartirá conmigo la sensación de sentirme mal por quejarme desde mi posición privilegiada, como persona que no ha visto al bicho de cerca y cuya familia ha podido mantener su puesto de trabajo. Pero no hablar de la parte negativa que ha tenido este año para todos sería un engaño.
Por supuesto también quiero hablar de las cosas buenas que me ha dado el 2020. He tenido la enorme suerte de empezar a formar parte del equipo de Manfred en una época en la que encontrar prácticas no ha sido nada fácil para muchos estudiantes. Me he involucrado más en la participación de la Tarugo, un evento maravilloso por la comunidad que lo rodea. En ambas organizaciones me he enriquecido con compañeros maravillosos. He adquirido la máxima responsabilidad en un proyecto que adoro como es Start UC3M, el cual me emociona ver evolucionar.
He aprendido hasta la saciedad. En mi familia — padres y hermano — hacía muchísimo que no pasábamos tanto tiempo juntos. La pandemia me ha hecho disfrutar de lo pequeño, de aquello que daba por hecho, de aquello en lo que no me paraba a pensar — ¿Quién me iba a decir que apreciaría tanto asomarme a la ventana a que me dé el aire o salir a pasear por un Madrid vacío a las 7 de la mañana? —. En 2020, desde luego, he seguido rodeada de personas maravillosas. He crecido muchísimo.
Hablemos de algo menos serio, hablemos de propósitos. Al comenzar este año solo tenía un objetivo: mantener la Operación Terminator de manera continua. Entiéndase por Operación Terminator retomar el ritmo deportivo que perdí al operarme hace tres añitos de una rodilla que estaba hecha un cisco. La cuarentena la empecé a buen ritmo, pero a medida que fueron pasando los meses y, sobre todo con el desconfinamiento, abandoné 👎.
Pasemos página.
2021: Tampoco nos vengamos arriba
Quiero plantear mis objetivos para este año nuevo desde la situación sanitaria que tenemos hoy en día, sin hacerme ilusiones 🤠:
Operación Terminator: vuelvo a las andadas. No es una cuestión estética, sino de salud. Cuando me operaron de la rodilla me avisaron de que la condición era que tendría que ser una persona muy deportista toda mi vida o se me acabaría rompiendo otra vez, cosa que acepté encantada. Ahora me toca apechugar con la decisión, fortalecer, proteger y trabajar en ella. Eso sin mencionar lo muchísimo que me ayuda el deporte a desconectar.
Para ello, yo que me conozco, sé que funciono por metas y objetivos, así que me tocará fijarme hitos y plazos para motivarme.
Terminator no se hizo Terminator en un día.
Ars longa, vita brevis. Me considero una persona creativa, y es una faceta mía que he dejado de lado. En mi trabajo, por supuesto, es algo que sí aplico, pero me refiero al plano del entretenimiento: la fotografía, el vídeo, hacerme mis álbumes, montajes, tocar la guitarra, escribir, cocinar… Son cosas que — aunque no se me dan especialmente bien 😛— me relajan muchísimo. No les he dedicado nada de tiempo este año y mira que tuve de sobra en marzo y abril.
Salud mental. En 2020 creo que he dado un paso grande al respecto, dándome respiros y descansos cuando los he necesitado. Mi siguiente reto es no ser tan perfeccionista, tan dura conmigo misma. La autoexigencia y la autocrítica pueden ser estimulantes, pero también pueden ser destructivas.
Retomar contactos. No quiero postergarlo más porque a saber cuándo podremos volver a vernos en persona y sin barreras. Al bajar el ritmo de socialización que tenía en mi vida pre-COVID he descuidado relaciones que apreciaba. Desde el año 1984 contamos con un invento maravilloso que hace que la imposibilidad de presencialidad sea solo una excusa: el teléfono. Mi propósito consiste en llamar más a menudo a quienes no pueda ver en persona.
Viajar mucho. No me hago ilusiones pero bueno sí. Ahí está :). Escaparme cuando se pueda y adonde se pueda, que también es muy sano.
Además, quiero conseguir los siguientes objetivos en las actividades que más marcan mi día a día:
- Dejar Start UC3M, al menos, como me lo encontré. Adaptar al contexto actual una asociación universitaria cuya actividad se basa en actividades presenciales, con un equipo de 44 personas en la que el 57% de las mismas se han incorporado este año, no está siendo fácil. Pero ahí estamos. Como me dijeron en la última retro la mayoría de líderes de equipos: “Lo estamos haciendo muy bien para la que se nos vino encima”. No soy conformista, vamos a por todas este 2021.
- Va siendo hora de que, a nivel profesional, defina un poquirritín el camino que quiero seguir y enfoque mi vida un poco más hacia el mismo. No hablo de especializarme, sino de centrarme.
- Sacarme la carrera. Si todo va bien, en 2021 ME GRADÚO :D.
Y con eso estaría todo. No me pongo como meta cosas que creo que he hecho bien este año, como ser más organizada con mi tiempo o aprender de manera autodidacta. Eso son cosas que, simplemente, quiero seguir haciendo :).
¡Vamos a merendarnos el 2021!